jueves, 18 de febrero de 2021

"Descachados"

 
Mi hijo (9 años) me dice últimamente, con esa mezcla de inocencia y crueldad propia de su edad, que desde el confinamiento me he “descachado”. Entiéndase con esto que quiere hacerme saber que ya no estoy “cachas”, o sea, fuerte. Y, más concretamente, que ya no tengo “tableta” (SIC). A decir verdad, nunca he tenido los abdominales de Cristiano Ronaldo, pero siendo de complexión delgada y practicando habitualmente deporte, en la mente de mi hijo su padre tenía un six-pack de portada del Men’s Health. Lo que sí es cierto es que a raíz de las restricciones Covid y de mi recién estrenado alcoholismo cervecero domiciliario, esa portada tendrá que esperar. Aun así, me temo que lo que subyace aquí es simplemente la pre-adolescencia de un hijo que empieza a dejar de idealizar al padre. Donde solo se veían virtudes se empiezan a ver defectos y donde había músculo ahora se vislumbra grasa. Tan natural como la vida. Es una fase con la que hay que lidiar y tener cuidado porque justo ahí, en ese “matar al padre” tan freudiano, es cuando comienzan a atraernos las nuevas experiencias y, por tanto, nuevos peligros. Lo prohibido adquiere un cariz más atractivo y lo que era muy malo ya no lo es tanto. De hecho, hasta el abusón de clase, en realidad, no parece tan cabrón… Mirándolo bien, es hasta majo, ¿verdad?

A todo esto, yo venía aquí hoy a hablar del hostiazo de PP y Ciudadanos y el auge de VOX en Cataluña. Aunque quizá no me he ido tanto.

1 comentario:

  1. Si es que no puedes con la mochila 😝 Y no, no te has ido nada del tema que venías a hablar. Me encanta la metáfora 😍

    ResponderEliminar